Resumen: Cuando se van a cumplir los primeros 10 años de andadura de Timor Oriental como Estado independiente, este artículo pretende ser una aproximación básica a la labor desarrollada por la Organización de las Naciones Unidas desde la ocupación indonesia hasta el presente.
El análisis arranca con un esbozo de la situación internacional a mediados de los sesenta, en pleno enfrentamiento entre bloques, como contexto necesario para comprender la invasión del territorio por las autoridades del Yakarta.
Seguidamente, se refieren los hitos más representativos ocurridos sustancialmente entre 1989 y 1999 y que llevarán a situar el conflicto en las agendas internacionales de las naciones del primer mundo y de las organizaciones internacionales más destacadas, rompiendo con ello un doloroso olvido.
A continuación, se abordan los prolegómenos de la consulta popular para la independencia, sus condiciones y su posterior desenlace, y dentro de aquella experiencia dramática, las vicisitudes de la primera misión de Naciones Unidas en aquellas tierras, la Misión de las Naciones Unidas en Timor Oriental (UNAMET).
Con esta base, y haciendo una referencia a las diferentes Operaciones de Paz que se irán sucediendo (UNTAET, UNMISET, y UNOTIL), se llega hasta la actual Misión Integrada de las Naciones Unidas en Timor Oriental (UNMIT).
Tras desarrollar los puntos más interesantes de su mandato originario de 2006 y de sus posteriores actualizaciones, quedará patente la importancia concedida al ámbito de la seguridad pública y del respeto a los derechos humanos en el conjunto de la intervención internacional, y lo que es esencial, la coherencia lograda entre fines planteados y medios efectivamente desplegados.
Tampoco podía este estudio obviar el hecho australiano como elemento necesario para comprender el proceso timorense de independencia y de consolidación estatal, por lo que se refieren los importantes intereses de Canberra en relación a Timor Oriental, y su consiguiente pretensión de liderazgo en el restablecimiento del orden y en la conformación institucional del país. Además, se intenta enlazar tal interrelación de vecindad con la actual coyuntura de concurrencia de influencias chinas y estadounidenses en la región, pues es un condicionante general futuro a tener siempre en cuenta.
El artículo continúa con la exposición de la problemática que sigue atenazando la supervivencia de esta joven nación, y que aún cuando en determinados aspectos ofrece una perspectiva positiva (superación de la situación de desplazados internos, mejora en la fractura social por la ocupación indonesia, etc.) en otras vertientes recuerda cuanto aún queda por hacer en el país (tensiones étnicas antes casi inexistentes, falta de expectativas entre la juventud, debilidad del sistema judicial y de seguridad, etc.).
Finalmente, se expone un balance final de la intervención de Naciones Unidas y de la UNMIT, en el que se aprecia como la Misión está siendo un instrumento de primer orden para aproximar la Comunidad Internacional al país, para generar un marco válido en el que conformar las sinergias de los distintos donantes y actores de la cooperación, y sobre todo para modular intereses presentes en el entorno próximo. Este apartado concluye con una breve mención a la solidaridad demostrada por España a favor de la paz y la seguridad en el Timor Oriental, y que queda patente en hechos como la presencia ininterrumpida de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en aquellas tierras, desde los primeros días de preparación de referéndum hasta el momento actual.